El Equipo de Dios tuvo un 2022 con muchas enseñanzas, alegrías y emociones de cara al futuro. Un año donde consiguió terminar en lo más alto de la Liga Femenina y en el tercer escalón del podio en la Copa Libertadores, que se disputó en Ecuador.
El recorrido inició en Bogotá y terminó en Quito. El primer juego de la temporada fue en la capital colombiana. El torneo este año permitió asimilar y trabajar más la idea del profe Usme. Ante La Equidad, Catalina Usme, dos goles de Wendy Bonilla e Ingrid Vidal le dieron los primeros puntos a las Escarlatas, tras golear 4-0 a las bogotanas.
Tuvo 11 partidos invictos en el arranque de la Liga Femenina, cosechó en el camino 9 triunfos y dos empates. Millonarios, Junior, Nacional, Bucaramanga, Orsomarso, Huila, el clásico ante el Cali en su estadio y Fortaleza fueron los triunfos del América de Cali Femenino, en la racha sin conocer la derrota, esta la conoció solo 2 veces en el campeonato.
La fase todos contra todos terminaría de ratificar el buen momento de las ‘Diablas Rojas’. Las victorias ante Llaneros, Cortuluá, Real Santander y Tolima, le entregaron el primer puesto de la tabla de posiciones con 41 puntos, tras 16 jornadas donde ganó 13 partidos, empató 2 y perdió solo 1. Hizo 40 goles, recibió apenas ocho.
En los cuartos de final enfrentó a Junior. En Barranquilla fue un partido muy cambiante. América de Cali empezó abajo en el marcador, pero gracias a los goles de Mariana Zamorano en dos ocasiones, Catalina Usme e Ingrid Vidal lograron darle vuelta a un compromiso que terminó 2-4.
En la vuelta, en el Pascual Guerrero, fue una lucha más ganada por parte del ‘Equipo de Dios’. Nuevamente, la figura, Mariana Zamorano aparecería para abrir el marcador. Wendy Bonilla cerraría el partido. El global terminó 6-2 y la clasificación a semifinales estaba en las toldas Rojas.
Pereira sería el próximo reto. En el Hernán Ramírez Villegas, el partido en la ida fue una batalla más. El 0-0 describió bien lo realizado por ambos equipos. El Pascual vería la definición y el pase a la final. Al minuto del encuentro, Wendy Natis marcó el primero del juego y Catalina Usme selló el paso a la final.
En los encuentros decisivos por su segunda estrella, el rival sería el Deportivo Cali. Era la primera vez que ambos equipos se medían por un título en la rama femenina. El Equipo de Dios sabía del reto y la importancia de un buen resultado en la ida para escribir una nueva página dorada en su gloriosa historia.
El 2 de junio, en Palmaseca, fue un partido trabado, difícil, con mucho nerviosismo, pero también valiente. El resultado final fue victoria para el Deportivo Cali 2-1. Todo se definía en el Pascual tres días después.
América de Cali imponía un nuevo récord en asistencia para un partido de fútbol femenino en Colombia, más de 37 mil hinchas llegaron a las gradas del ‘sanfernandino’. El compromiso dejó grandes momentos. Nuestra capitana, Catalina Usme, abriría el marcador, luego de una jugada de Mariana Zamorano. “Corría hacía la gloria”, señala Ingrid Vidal al describir la emoción tras anotar el 2-0 para el América de Cali. Definición de primera con su pierna derecha. El título se teñía de Rojo. El suspenso llegaba en la segunda parte cuando Linda Caicedo descontara para el Cali, pero nuevamente nuestra capitana, tomaría el balón y con un cobro exquisito de zurda cambiaría un penal por gol y el definitivo 3-1 con el que levantaron su segundo título en la Liga Femenina.
Ahora, el reto que se venía era la Copa Libertadores Femenina 2022 a disputarse en Quito, Ecuador. Las Escarlatas en el sorteo quedaron en el grupo D. Desde allí iniciarían la búsqueda de la tan anhelada copa continental.
Fue una demostración de poderío su paso por la zona. Victoria 1-0 ante Santiago Morning, 8-0 ante Deportivo Lara y 2-1 ante Alianza Lima. 9 puntos de 9 posibles, solo un gol en contra y con la satisfacción de tener a Catalina Usme como la máxima goleadora histórica de la Copa Libertadores.
En los cuartos de final, el rival fue la Universidad de Chile. El contrario puso complicado las cosas, se fue en ventaja antes de finalizar la primera parte. Confiadas en su trabajo, las Escarlatas salieron a dar todo lo que tenían en el tanque. Lo consiguieron, terminaron empatando 1-1 y a los penales.
Natalia Giraldo, nuestra arquera, se plantó en la línea y atajó el quinto penal de las chilenas. En los pies de Carolina Pineda estaba la clasificación. La volante remató al palo derecho de la guardameta, que intentó parar, pero ese remate iba cargado de muchas ilusiones y sueños y fue más fuerte. Todos a celebrar, América de Cali estaba en las semifinales de la Copa Libertadores.
El Equipo de Dios cada que jugó el certamen continental estuvo siempre en las semifinales. Esta vez, como en las anteriores, el rival era brasilero. Palmeiras, el próximo escalón a pasar. Luego de un primer tiempo con mucho roce, fricción y faltas, Palmeiras se fue en ventaja. El segundo tiempo fue una muestra de carácter de las americanas, pero los 45 minutos complementarios del compromiso no fueron suficientes para llegar al empate e irnos a los penales y que la esperanza no acabara en los 90 reglamentarios. El final llegó y la eliminación se concretó, 1-0 ganaron las cariocas, quedaba el partido servido por el tercer lugar.
“Nosotras sabíamos a lo que veníamos”, dijo Catalina Usme, luego de la victoria 5-0 sobre el Deportivo Cali que le dio el tercer puesto del podio a las Rojas en la Copa Libertadores y una nueva definición ganada sobre el clásico rival. Sara Sofía Martínez, Diana Ospina, Mariana Zamorano, María Fernanda Agudelo y Daniela Castellanos marcaron los goles de una jornada que se recordará por mucho tiempo.
América de Cali Femenino, hasta la fecha, siempre que disputó una Copa Libertadores Femenino quedó en el podio. Dos veces en el tercer lugar y una vez como subcampeonas. El camino fue denso, rocoso y lleno de enseñanzas en este 2022, donde encontramos nuevos retos y objetivos; además, dejó grandes aprendizajes de cara a lo que viene.
¡AMÉRICA, AMÉRICA, AMÉRICA!